Me duele la cabeza, las costillas y el tobillo.
Tengo la sensación de que me hallan pegado una paliza.
Cada discusión estupida, cada frase mal dicha, cada silencio malinterpretado, o miradas inquisidoras.
Cada una de esas cosas, es un golpe por dentro.
Como si me envolvieran en una manta mojada. Los golpes no se ven, pero duelen.
Y hoy estoy dolorida y quemada.
Sin ganas de nada. Con desconfianza y decepcion.
Y yo que pensaba que se completaria una semana sin discusiones.
Soy una ilusa..
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